En esta ocasión, quiero hablar de un artículo que he leído titulado "La feminización de la profesión docente o el letal efecto del patriarcado" de Jose Luis Medina (2003).
En él se habla de que la presencia de mujeres docentes es mayoritaria en las escuelas, en especial en los primeros niveles educativos. La cifra va descendiendo a medida que se asciende por los distintos niveles educativos. Medina explica que el
sexismo de la sociedad se transfiere al sistema educativo y las llamadas “virtudes
femeninas” como la pureza, la entrega, el servicio, la abnegación, entre otros,
son valores de cuidado y de crianza a los que se prioriza sobre la actividad
educativa.
La
estructura y las relaciones de las familias se reflejan en las escuelas
escuelas y la maestra ejerce el papel tradicional de la mujer en la familia, es
decir, el de cuidado.
De hecho,
hace poco leí una noticia acerca de que cada vez hay menos maestros en las
escuelas de Silió (2017), en la que una socióloga explica que “la enseñanza
temprana se ve como una prolongación de la maternidad, se les pide que en clase
sean más maternales que profesionales". Asimismo, este artículo
corrobora el hecho de que el número de docentes hombres aumenta con más edad
del alumno, lo cual se traduce en que hay más varones enseñando cuando se exige
una licenciatura y no estudios medios. Este hecho también fue recogido en una
entrada anterior titulada micro-narrativa acerca del género.
Respecto
a la identidad, se trata de una cuestión cultural, en la que se identifica “lo
masculino” y “lo femenino” que, según Medina, constituyen subjetividades
independientes de la biología.
De esta
manera, un hombre socialmente puede expresar su subjetividad masculina, pero no
le está permitido expresar la femenina y se ve obligado a ocultarla.
Socialmente
se cree que características masculinas son activas y, por tanto, están mejor
valoradas; las femeninas, en cambio, son pasivas. No obstante, el autor
defiende que ambas acciones son fundamentales en el desarrollo de nuestra
sociedad.
La
enseñanza en Educación Infantil, entonces, se trata de una ocupación
socialmente organizada y percibida como una actividad femenina y práctica. Se
mantiene invisible e incluso marginal en la jerarquía ocupacional del sistema
educativo.
Por otro
lado, se asocia la etapa de educación
infantil con las virtudes femeninas para justificar su bajo estatus en el
sistema educativo, lo cual es consecuencia del sistema patriarcal.
En mi opinión, a pesar de que el
Ministerio de Educación declare que "El género del profesor es
irrelevante a la hora de transmitir a los alumnos los conocimientos y valores”,
pienso que es importante que en las aulas los niños y las niñas tengan
diferentes figuras de referencia pertenecientes a géneros distintos. De esta
forma, se evitará que interioricen jerarquías cuanto al género al descubrir que
ambos cumplen con las mismas funciones y roles, sin dominancia de uno sobre otro.
Como consecuencia de la poca presencia de profesores varones en las aulas, las familias desarrollan prejuicios hacia los pocos que hay, teniendo como resultado que se dé una situación incómoda tanto para ellas como para el propio profesor, que pierde motivación al no estar bien valorado. Todo ello tiene influencia en el hecho de que futuros chicos que deseen acceder a la profesión no lo hagan por el miedo de la reacción social y sus prejuicios. Como en el caso de la película "La Caza", pudimos ver que las personas enseguida lanzaron los prejuicios interiorizados hacia el profesor ante la mínima sospecha y sin conocer la verdad, dejando entrever que, en caso de haber sido éste una mujer, esa situación desagradable no hubiera ocurrido seguramente.
En conclusión, tanto un hombre como una mujer pueden llegar a ser buenos/as docentes y en nada influye el género, sino las propias capacidades de la persona, su implicación, su vocación y su motivación.
Referencias:
Medina, J.L. (2003). La feminización de la profesión docente o el letal efecto del patriarcado. Aula de Innovación Educativa, 127.
Silió, E. (2017). Día del maestro: cada vez hay menos profesores varones. El País. Recuperado de https://politica.elpais.com/politica/2017/11/27/actualidad/1511763591_005291.html
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